¿Qué es un psicópata? ¿Cómo lo podemos reconocer? En este artículo trataremos de aclarar tales cuestiones. Para ello nos basaremos en los libros Amor Zero (10ª ed., 2022) de Iñaki Piñuel y Cara a cara con el psicópata (8ª ed., 2020) de Vicente Garrido.
¿Es el psicópata un asesino?
Es importante tener claro que no existe una relación de causa-efecto entre la psicopatía y el asesinato que se pueda generalizar. El hecho es que no todos los psicópatas son asesinos ni tampoco todos los asesinos unos psicópatas. «El crimen y la violencia delictiva no es una condición necesaria de este trastorno, sino sólo de una parte muy pequeña de los que lo padecen» (Garrido, 2020, p. 26).
Sin embargo, Garrido nos recuerda que «el psicópata, como el delincuente más peligroso y reincidente, es una realidad avalada por una investigación muy sólida en criminología» (p. 26).
Es decir, de entre los psicópatas pocos son asesinos y delincuentes violentos, pero aquellos que lo son se caracterizan por ser realmente los más peligrosos.
La legión de psicópatas integrados
Si bien el psicópata es lo que el DSM-V técnicamente denomina «trastorno de personalidad antisocial» y dicho trastorno le conlleva a realizar diversos tipos de actos antisociales, «la mayor parte de ellos están perfectamente normalizados e integrados y pasan completamente desapercibidos, camuflados detrás de su enorme habilidad para el camaleonismo social» (Piñuel, 2022, p. 17).
Garrido sostiene que «muchos más psicópatas están integrados en la sociedad que marginados de ella en cárceles u hospitales psiquiátricos» (p. 15). Según Piñuel, «son legión los individuos aparentemente normales que en realidad presentan alguna modalidad de las denominadas personalidades psicopáticas» (p. 17). «Cualquiera con quien compartes tu vida puede ser un psicópata normalizado o integrado sin que hayas llegado siquiera a sospecharlo» (Piñuel, p. 21).
En esa misma línea, Piñuel realiza las siguientes afirmaciones (pp. 21-22):
El peligro radica en que un psicópata integrado parece ser y se presenta ante todo el mundo simple y llanamente como una persona encantadora y maravillosa, dotada de la más impecable imagen pública que quepa imaginar.
Creer que los psicópatas asesinan en serie y que depredan por las vías poco frecuentadas a transeúntes nocturnos no precavidos forma parte de una ignorancia y confusión generalizada que resulta fatal para muchas personas.
La mayoría de los psicópatas que existen en nuestra sociedad son depredadores ignotos de guante blanco, que pasan por gente normal: abogados, catedráticos, políticos, sindicalistas, periodistas, funcionarios, policías, madres, padres de familia…
La mayoría de ellos no llegarán a matar nunca físicamente a nadie, pero si te cruzas como obstáculo en su camino, conocerás su implacable lógica: la seducción, la compra, la manipulación o bien la eliminación y anulación del elemento obstaculizador.
Por su parte, Garrido escribe lo siguiente (p. 16):
Lejos de constituir un mero arquetipo o subgénero en el cine o la literatura, donde muchas veces la psicopatía se presenta a modo de guiñol en un espectáculo para consumo de adolescentes, el psicópata constituye una realidad tangible, un gravísimo trastorno de la personalidad que causa grandes males y descalabros a los individuos y a toda la sociedad.
¿Qué caracteriza a un psicópata?
En palabras de Garrido, «el psicópata parece un tipo normal, pero es porque nos fijamos en lo que dice, porque tenemos la voluntad de creer a la mayoría de los que forman parte de nuestro entorno» (p. 21). Según el referido autor, la psicopatía se puede definir de la siguiente manera (p. 27):
Es un trastorno gravísimo de las emociones y los sentimientos de un individuo, que afecta también al razonamiento o juicio, en la medida en que éste difícilmente puede ser profundo o sensato si no viene arropado por el aprendizaje emocional que nos acompaña a lo largo de la vida por el mero hecho de acumular experiencias (…) Lo esencial del psicópata ha sido mostrar un comportamiento que no reconoce otra ética que la propia, libre de inhibiciones y frenos que a los demás nos impiden aprovechar nuestra ventaja o fuerza para obtener bienes materiales o una posición de privilegio.
Para Garrido los psicópatas tienen dos cualidades muy particulares: por un lado, tienen una gran capacidad de ocultamiento y simulación, de aparentar ser lo que no son. Saben mostrarse mejores de lo que son e, incluso, fingir tener emociones que realmente no poseen (p. 22). Y, por otro lado, son especialistas en obtener el dominio y el control de su ambiente de la manera más brutal y egocéntrica (p. 23). Precisa Garrido que «es ésta su motivación fundamental» (p. 23) pues «el psicópata no puede establecer una relación auténticamente humana, simula lo que hace, mientras busca controlar y dominar las personas y los sitios en los que se mueve» (p. 24).
De todas formas, «aunque el psicópata lo es en toda su persona, y durante todo el día, en muchas ocasiones canaliza su ansia de dominio hacia un contexto determinado, y en determinados ambientes nada indica que es un sujeto profundamente peligroso» (p. 24).
Para mí básicamente son muy malas personas y pienso que esa es la raíz del problema.Mi marido lo es pero no me da he dado cuenta hasta mi jubilación,yo ya cuando éramos novios ví algo que me hacia sentir mal,en principio no queria salir con él pero insistió,le conocí en la fiesta de mi pueblo aunque él dice ahora que me vió en León cuando iba precisamente con un chico que había sido compañero mío en la escuela,ellos iban para Madrid en autocar y yo al norte,digo escuela porque así se le llamaba antes,pero yo ni me dí cuenta ,solo ví a mi compañero y nos saludamos.
Ahora que pasaron muchos años,más de cuarenta pienso que fué a la fiesta de mi pueblo por lo que le contaría mi compañero,él es muy interesado y la casa de mis padres en aquel tiempo era de las fuertes del pueblo ,él jamás había ido por esa zona a las fiestas aparte de que ya no vivía en Galicia,estaba de vacaciones.Otro detalle significativo es que después de estar conmigo en la fiesta,me fuí antes de que terminara,quiso estar también con la amiga que yo estaba,me lo dijo ella después como que no le había parecido normal eso,yo entonces no le dí ninguna importancia hoy quizá mi amiga tuviese razón,poco a poco veía como enseguida cogía unas confianzas muy rápidas que a mí no me parecían las de una persona muy seria cuando yo estaba con más amigas.Mas tarde empezamos a salir ,coincide que yo me iba a estudiar a Madrid y en principio los domingos eran los días en que nos veíamos,no era nada puntual y eso a mí molestaba,me hacía esperar y así bastantes más veces.En una ocasión paseando coincide que se encontró con una compañera fué a saludarla y no me la presentó,los detalles que me molestaban se iban sumando.Ya más tarde nos empezamos a ver más a menudo,sábados incluidos en los que él trabajaba por las mañanas y cuando salía antes de ir a comer a su casa quería verme un rato,le caía de paso y después por la tarde ya más tiempo,hasta que en uno de los sábados me llama para decirme que no iba a pasar a verme antes de ir a comer que se iba directamente a su casa sin darme más explicaciones,yo no le dí importancia porque nos veíamos después, por la tarde vino con el coche que lo llevaba siempre al trabajo y al sentarme ví que la visera parasol de la dcha.estaba bajada,le pregunté si había llevado a alguien y me lo negó,nunca había llegado con ella bajada y sospeché porque noté que me había mentido y sin yo exigírselo me lo juró y perjuró,me enfadé y me fuí. Nos vimos el próximo fin de semana pero en toda la semana no me había llamado por teléfono,y gran error lo llamé yo para preguntarle y ya me dijo que sí que había llevado a una compañera al salir del trabajo cuando el autobús lo tenía casi enfrente de la calle de la oficina donde trabajaban,ahí yo tenía que darle un adiós definitivo,ingenua de mí,además de que el apartamento que había comprado estaba muy cerca,pasado bastante tiempo vamos a limpiar el apartamento,era de segunda mano y yo al limpiar el pié del lavabo me encontré con una caja de preservativos escondidos en la parte de atrás ,eso ya fué el colmo pero aún así me seguía con venciendo con sus mentiras de las que yo no era consciente en aquel tiempo,hoy lo dejaría con la experiencia de los años.Resultó ser un mentiroso patológico ,con total descaro,egoísta,con miradas asesinas si se le lleva la contraria,no lo admite y es vengativo,es un gran manipulador y siempre hay que hacer lo que a él le gusta,es muy dominante.Ahora me doy cuenta de la ingenuidad que yo tenía y de me daba cien vueltas ,ya es muy tarde .Otro día seguiré contando anécdotas ,es para escribir un libro ,estos personajes te destrozan psicológicamente.